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MEXICO HOY Sabado 7 de abril de 2001
SUCESOS Especial
No hay delito que perseguir, dice el ex titular de la Secodam
CALLA AYUB ANTE PGR SOBRE FRAUDES EN CFE
Citan a ex directores de la paraestatal ante la Fiscalía Especializada en Delitos cometidos por Servidores Públicos.
Por María del Pilar Martínez
México HOY
El director de la comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub se negó a rendir su declaración preparatoria ante la Fiscalía Especializada en Delitos cometidos por Servidores Públicos, el pasado 2 de abril, en relación con desvios detectados en la termoeléctrica de Petacalco, Guerrero.
Citado a raíz de la denuncia que presentó el diputado federal Cuauhtémoc Velasco ante la Secretaría de la Contraloría, Ayub decidió presentar por escrito su declaración.
Por su parte, el ex secretario de la Contraloría y Desarrollo Administrativo, Arsenio Farell Cubillas, también compareció ante la Procuraduría General de la República (PGR) el pasado 2 de abril, al ser inculpado com responsable de ocultar actos de corrupción ocurridos en la Comisión Federal de Electricidad desde 1998.
En su "escueta" presentación ante la Fiscalía Especializada en Delitos cometidos por Servidores Públicos, Farell Cubillas destacó que en todo momento se atendieron las peticiones y observaciones que realizó el Diputado Cuauhtémoc Velasco, quien presentó la denuncia en la PGR.
Además, señaló que si no se puso en conocimiento las irregularidades que se dieron en la licitación adjudicada al consorcio Techint, se debió a que "no hay delito que perseguir", agregó, en todo caso estas decisiones correspondía hacerlas a la Unidad Jurídica de la Secodam.
De acuerdo con el abogado del diputado Velasco Oliva, Gabriel Regino García, en su comparecencia Farell Cubillas trató de exculparse en todo momento, pese a que desde 1999 reconoció irregularidades cometidas en el contrato firmado con la empresa Techint GMD y CFE, en donde se inhabilitó a Eric Butcher Martínez, quien abusando de su cargo realizó fraudes en la paraestatal.
LA INVESTIGACIÓN SIGUE
Tras la ratificación de la denuncia presentada por el diputado Cuauhtémoc Velasco el 13 de marzo, han acudido a la procuraduría varios servidores públicos a comparecer.
En este tenor, ya fueron citados Rogelio Gasca Neri y Guillermo Guerrero Villalobos, ambos ex directores de la paraestatal, quienes se reservaron su derecho a no declarar y en próximos días deberán presentar su declaración por escrito.
Asimismo, se localizará a Eric Butcher Martínez, quien luego de ser inhabilitado se fue al extranjero, pero es a él a quien se considera el principal organizador del mega fraude.
Regino García resaltó que el Ministerio Público deberá continuar con la investigación, luego de la ampliación de la denuncia presentada por el legislador.
Además, seguirán acudiendo a la Fiscalía Especializada en Delitos cometidos por Servidores Públicos, funcionarios del comité de adquisiciones de la CFE.
LA HISTORIA
Según testimonios presentados a este medio, existen nueve denuncias que se hicieron en tiempo y forma, desde el momento en que fueron detectadas las irregularidades en la CFE, luego del que el ex presidente Ernesto Zedillo ordenara auditar todos los contratos de la paraestatal y que le costaron la destitución a Rogelio Gasca Neri.
En los casos denuciados destacan fraudes por 27 mil millones de pesos, los cuales, informó el diputado de Convergencia por la Democracia, Cuauhtémoc Velasco, están plenamente comprobados. Una de las obras fundamentales que dieron pie para que se "destapara la cloaca" en la CFE fue la construcción de la terminal Termoeléctrica para manejo y recibo de carbón en Petacalco, Guerrero. Esta obra, representó para la nación un gasto aproximado de 11 mil millones de pesos. Hasta el momento no se ha avanzado en las investigaciones por parte de la PGR y se espera que las nuevas autoridades de la Secodam den trámite a las denuncias.
Esta planta, adjudicada a Techint, la cual duró mucho tiempo parada, se echó a andar a marchas forzadas al término del año pasado.
Por otra parte, las irregularidades que implican los 27 mil millones de pesos, se encuentra el contrato 951045 que ampara la realización de 20 obras de las que 10 son líneas de transmisión y 10 subestaciones eléctricas, convenio otorgado a la empresa AEG-Mexicana y que representó 490 millones de pesos. Dado que se realizaron pagos en exceso, convenios adicionales, retraso firma de contrato ante una mala planeación.
Asimismo, ocurrió en la orden de compra 97-2-51258-AY6, en donde Westighouse Electric Company realizó tres proyectos de 150 Mega Watts (MW) que representaron una erogación de mil 640 millones de pesos sin previa autorización de la Cámara de Diputados en el ejercicio presupuestal 1997, además a todas luces se hizo fuera de la legalidad, pues hasta el momento se desconoce si existió concurso de licitación de por medio.
n esta lista se incluyen la compra de dos turbogeneradores con número de orden 97-1-51259-AY6, en donde Marubení fue la empresa "ganadora", pero al igual que los casos anteriores no existió una licitación, como tampoco se contó con la aprobación de parte del Congreso de la Unión, pues no seincluyó en el presupuesto. Se dice que esta erogación no era tan urgente, ya que las obras fueron entregadas en forma extemporanea y se pagó por ellas mil 100 millones de pesos.
La termoeléctrica de Topolobampo es otro de los casos, la licitación marcada con el número SDC-GPT-03/90 fue puesta en manos de Bufete Industrial Construcciones, que debía entregar la planta generando 320 MW. La falta se comete desde el momento en que no se firma contrato de acuerdo con los tiempos establecidos.
Ello tiene una repercución muy importante en el costo, pues originalmente se pagarían 246 millones de dólares y que a final de cuentas se incrementó a 420 millones de dólares.
El llevar la energía eléctrica al consumidor final también ha representado un gran negocio, ya que 19 obras de las cuales siete fueron líneas de transmisión y 12 subestaciones de servicio, dieron fuertes ganacias nuevamente a la empresa italiana Techint, a la cual se la pagaron 500 millones de pesos de forma irregular, ya que hubo pagos en exceso, modificaciones en las fechas establecidas en la licitación y se cambió el plazo en que habría de firmarse el contrato.
Otra de las termoeléctricas que representaron un fuerte gasto para el país es la de Samalayuca, en donde se están generando 200 Mega Watts menos de lo solicitado por la CFE que eran 700 MW.
Esta planta fue adjudicada a General Electric-ICA y se le pagaron 701 millones de dólares, pero en la oferta el costo original era de 590 millones de dólares.
Es claro, argumentan consultores del sector eléctrico, por lo que representa económicamente que los que participaron en todas las estas corruptelas tienen una lucha contra el tiempo, ya que es cuestión de días que se desate el primero de los muchos escandalos sobre corrupción que se efectuaron bajo el amparo del regimen priista.
A la lista de las empresas que se coludieron con funcionarios de la CFE se suma Tribasa, pues recibió un contrato (951044) para el diseño, equipamiento, construcción, pruebas y puesta en servicio de 11 obras distribuidas en ocho subestaciones de transformación y 3 líneas de transmisión ubicadas en los estados de Oaxaca, Campeche y Yucatán.
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